Segunda Cámara

OBJETIVO

¿QUÉ? Conocer y comprender los simbolismos esotéricos de la Semana Santa.

¿CÓMO? A través del estudio, análisis, discernimiento y la práctica de los tres factores de la revolución de la conciencia intensamente vividos.

¿PARA QUÉ? Para vivir nuestra propia iniciación espiritual y encarnar a nuestro Cristo íntimo.

INTRODUCCIÓN

En los simbolismos trascendentales de la Semana Santa encontramos las enseñanzas medulares del cristianismo. No podría haber un cristianismo esotérico sin todas las enseñanzas derivadas de la pasión, muerte y resurrección del gran Kabir Jesús el Cristo. La Semana Santa representa el proceso de la iniciación espiritual por la que necesitamos pasar cada uno de nosotros hasta alcanzar la encarnación de nuestro Ser interior profundo.

Mucho se ha dicho sobre el Drama Cósmico; incuestionablemente, este Drama está formado por los cuatro evangelios.

Se nos ha dicho que el Drama Cósmico fue traído por los Elohim a la Tierra; el Gran Señor de la Atlántida representó ese Drama en carne y hueso.

El Gran Kabir Jesús también hubo de representar el mismo Drama públicamente en la Tierra Santa.

Aunque hubiese muerto y resucitado al tercer día de entre los muertos, de nada sirve eso si no muere y resucita en nosotros también.

La Biblia no es un libro de historia. No podemos leerla como leer un periódico. Es un libro sagrado para iniciados. Es un libro de alquimia, cábala, esoterismo. En la Biblia encontramos al inicio los 7 días de la creación del Génesis; al final encontramos los 7 sellos del Apocalipsis y en medio los 7 días de la Semana Santa.

La Semana Santa tenemos que vivirla dentro de nosotros mismos, en la Gran Obra o iniciación esotérica personal a través de los tres factores del despertar de la conciencia.

La Semana Santa o el viacrucis es el proceso de iniciación espiritual personal de las nueve iniciaciones mayores alcanzadas trabajando con los tres factores de la revolución de la conciencia. Es el proceso iniciático de creación de los siete cuerpos y el ascenso de la energía kundalini en cada uno o cristificación o eliminación del ego de cada cuerpo para luego alcanzar la resurrección.

No es solo una rememoración, ni recordación, ni celebración de un hecho histórico, es además el estudio y discernimiento sobre cómo va mi proceso iniciático del despertar personal.

En verdad que nuestro Maestro interior debe vivir todo su vía crucis en el fondo mismo de nuestra propia alma.

En el trabajo interior profundo, dentro del terreno de la estricta auto observación psicológica y de la alquimia hemos de vivenciar en forma directa todo el drama cósmico.

DESARROLLO

1. SOBRE LA FECHA DE LA SEMANA SANTA

Comencemos hablando sobre la fecha en que se celebra la Semana Santa, esta es una fecha variable, unos años es en el mes de marzo, otros en el mes de abril. ¿Cómo podemos explicar el porqué de esta variación?

El sol cada año realiza un viaje olímpico que comienza desde el 25 de diciembre en adelante, el sol avanza hacia el norte desde el 25 de diciembre en adelante y en el equinoccio de la primavera llega al máximo hacia el norte, entonces madura la uva y el trigo; es precisamente en el equinoccio de la primavera cuando debe el Señor pasar por su vida, pasión, muerte para luego resucitar. La Semana Santa es en primavera. Luego, el sol regresa otra vez hacia el polo sur, hacia la zona donde está la Antártida, se va alejando del hemisferio norte y el 24 de diciembre habrá llegado al máximo en su viaje hacia el sur. Para reiniciar de nuevo su viaje olímpico.

En las sagradas escrituras, obviamente se habla del acontecimiento solar y hay que saberlo entender entre líneas. Cada año se vive en el macrocosmos todo el drama cósmico del sol; cada año repito. Téngase en cuenta que el Cristo Cósmico debe crucificarse cada año en el mundo, vivir todo el drama de su vida, pasión y muerte, para luego resucitar en todo lo que es, ha sido y será, es decir, en todo lo creado.

La Pascua tiene mucha relación con el calendario agrícola y el tiempo de renovación de la tierra. Para calcular su celebración se toman en cuenta el sol y la luna (sol de primavera y luna llena). En ese sentido, se debe buscar el primer domingo posterior a la primera luna llena de la primavera septentrional (hemisferio norte). Una vez encontrada la Pascua, se cuentan cuarenta días antes para fijar el primer día de la Cuaresma, es decir, el correspondiente al llamado “miércoles de ceniza” (los domingos, no se tienen en cuenta para hacer este cálculo).

El Equinoccio de primavera es el momento en que el Sol cruza directamente el ecuador, creando un día y una noche de la misma duración.

El equinoccio de primavera ocurre entre el invierno y el verano. En el hemisferio norte, dicho equinoccio se da el 20/21 de marzo.

El día en que se celebra la resurrección de Jesucristo, ocurre el primer domingo luego de la primera luna llena que sigue al equinoccio de primavera, establecido por el primer concilio de Nicea en el año 325 después de Cristo.

Entonces no es la fecha exacta de la muerte física y real de nuestro Señor Jesús el Cristo. Es una fecha cósmica-astronómica-simbólica, como también lo es la fecha de su nacimiento el 25 de diciembre.

2. SOBRE LA SEMANA SANTA

La Semana Santa es la más santa de todas las semanas del año, porque es la semana que uno tiene que vivir, y cada día de esos equivale a largos periodos de Trabajo iniciático; encierra todo el viacrucis, todo el camino iniciático que cada uno como cristiano tiene que vivir en su intimidad. Su propia iniciación espiritual a través de todos los elementos, todos los símbolos que contiene el vía crucis, con sus 14 pasos o estaciones (1 + 4 = 5 = de acuerdo con la ley).

Vamos a ir conociendo el verdadero cristianismo que cada uno de nosotros debe vivir en carne propia.

La Semana Santa contiene los trabajos espirituales que uno tiene que vivir en la iniciación espiritual. Cada símbolo equivale a largos periodos de trabajo de creaciones y purificaciones internas a nivel físico, emocional, mental, concientivo y espiritual. En todo caso cada cual tiene que vivir su Semana Santa, pues, puede durar muchos años.

Precisamente porque debe penetrar en estas 7 esferas del ser humano es que la Semana Santa está formada por 7 días. Simbolizando los 7 pasos de la fuerza Chrestos a través de las 7 dimensiones de manifestación de vida en el microcosmos hombre y mujer: físico, etérico, emocional, mental, volitivo, concientivo y espiritual.

Les decía que el Cristo Íntimo, el Cristo Cósmico, tiene que dar tres pasos: De arriba hacia abajo, a través de las siete Regiones del Universo. También les he dicho, que el Cristo debe dar tres pasos, de abajo hacia arriba. He ahí el misterio de los tres pasos y de los siete pasos de la Masonería. Es una lástima que los hermanos Masones hayan olvidado esto; en todo caso el Chrestos – el Logos – resplandece en el Cenit de la Medianoche Espiritual, como en el Ocaso o en el Oriente, y cada una de estas tres posiciones, es respetada en las Siete Regiones. El místico que se guía por la estrella de la Media Noche, por el Sol Espiritual, sabe lo que significan esos tres pasos, dentro de las Siete Regiones.

Pensamos también en el Sol, en el Rayo y en el Fuego; he ahí las tres lumbreras, los tres aspectos del Logos, en las siete Regiones.

La Semana Santa es profundamente significativa. Recuerden los siete y los tres pasos de la Masonería. El Cristo debe arder primero que todo, en nuestro cuerpo humano. Más tarde la llama debe depositarse en el fondo del alma. Y, por último, en el fondo del espíritu. Estos tres pasos a través de las siete esferas, son profundamente significativos. Obviamente estos tres pasos, básicos, fundamentales, se hallan contenidos en las siete esferas del mundo y del Universo. Tres etapas de profundidad en cada cuerpo.

Incuestionablemente la Semana Santa tiene raíces esotéricas muy hondas, porque el iniciado debe trabajar sobre las fuerzas Lunares, y sobre las fuerzas de Mercurio, y con las fuerzas de Venus y del Sol, y de Marte, de Júpiter y de Saturno. El Logos, se desenvuelve en siete regiones y de acuerdo con los siete planetas del sistema solar. (los siete días).

La llama debe aparecer en el cuerpo físico, debe avanzar en el cuerpo vital, debe proseguir su camino por la senda astral, debe continuar su viaje por el mundo de la mente, debe llegar a la esfera de Venus en el mundo causal, debe continuar o proseguir su viaje por el mundo Búdico o intuicional, y, por último, en el séptimo día, habrá llegado al mundo de Atman, al mundo del espíritu; entonces el Maestro recibirá el Bautismo del Fuego, que lo transformará radicalmente.

Obviamente todo el Drama Cósmico, tal como está escrito en los cuatro Evangelios, deberá ser vivido dentro de nosotros mismos, aquí y ahora. Eso no es algo meramente histórico, es algo para ser vivido ¡aquí y ahora!

Reflexionemos profundamente entonces, sobre todas las enseñanzas de la Semana Santa. No debemos pensar que estamos celebrando simplemente un aniversario más de la muerte y resurrección de nuestro Señor Jesús el Cristo. No es el recuerdo de un hecho histórico. La Semana Santa nos muestra un mapa que todos necesitamos recorrer, vivir en carne propia, dentro de nuestra vida diaria, eso es el cristianismo iniciático, esotérico, secreto.

Durante los días de la Semana Santa se da una vibración cósmica muy particular y profunda en toda la naturaleza, y es especialmente el Viernes Santo a las 3 de la tarde, cuando encontramos una vibración espiritual muy profunda y poderosa en toda la creación. Nosotros podemos aprovechar estas influencias espirituales tan especiales sintonizándonos con la naturaleza a través de la oración, el ayuno, la reflexión, la meditación, el silencio, la contemplación, el retiro y recogimiento espiritual.

Estamos completamente equivocados si pensamos que el Viernes Santo es para disfrutar de alegres vacaciones, banqueteos, juegos, bailes, playa, actividades mundanales, etc. Es absurdo completamente que los que nos llamamos cristianos el Viernes Santo nos entreguemos a comer y beber más de lo normal. El Viernes Santo a las tres de la tarde debemos encender una vela en nuestros hogares, hacer una oración en familia y entrar en reflexión espiritual por unos minutos. El Viernes Santo es de oración, ayuno y meditación para captar las fuerzas Crísticas vibrantes en la naturaleza.

3. SOBRE LA INICIACIÓN

El Libro de Job es una representación completa de la Iniciación antigua y de los pueblos que precedían a la Magna Ceremonia.

Obviamente todo el Drama Cósmico, tal como está escrito en los cuatro Evangelios, deberá ser vivido dentro de nosotros mismos, aquí y ahora. Eso no es algo meramente histórico, es algo para vivir ¡aquí y ahora! La iniciación es tu propia vida, intensamente vivida, concientemente vivida en estado de alerta novedad, alerta percepción, observante, vigilante, presente. La iniciación es del alma, del Ser, no es del ego ni de la personalidad. Es el proceso conciente de la encarnación de nuestro Ser.

4. SOBRE LA CUARESMA

Período de cuarenta y seis días, desde el miércoles de ceniza hasta la víspera del domingo de Resurrección, en el cual algunas iglesias cristianas preceptúan ciertos días de ayuno, recogimiento y penitencia en memoria de los cuarenta días que ayunó Jesús en el desierto. “Desde 1966 el ayuno y la abstinencia durante la cuaresma son solo obligatorios el miércoles de ceniza y el viernes Santo”.

La Cuaresma (en latín: cuadragésima, cuadragésimo día (antes de la Pascua) es el tiempo litúrgico del calendario cristiano destinado a la preparación espiritual de la fiesta de la Pascua. Se trata de un tiempo de purificación e iluminación, celebrado en la Iglesia católica, copta, ortodoxa, anglicana, y buena parte de las Iglesias protestantes (incluyendo algunas evangélicas), aunque con inicios y duraciones distintas.

“EL GÉNESIS DE ENOCH”. Las tremendas energías sexuales que invaden en la primavera a nuestro planeta tierra, las cuales incitan a las parejas a la reproducción. Los gnósticos las evitan mediante la práctica anual de los cuarenta días de abstinencia y continencia, dejando de comer cualquier clase de carnes y suspendiendo la práctica del ARCANO A.Z.F., este hecho sucede desde los cuarenta días contados desde el Viernes Santo en adelante. Los cuarenta días antes es una forma errónea porque no corresponden con las fuerzas sexuales que recibe nuestro planeta. Las leyes de la Naturaleza solo las entienden los que tienen sus sentidos internos despiertos, y no se pueden escribir porque se desfiguran.

La Cuaresma. Rito de imposición de la ceniza, parte integral de la celebración litúrgica del Miércoles de Ceniza con que se inicia la Cuaresma en el rito romano. Se observa al celebrante con vestimenta de color morado o purpura, típica de este tiempo litúrgico, que simboliza la actitud penitencial.

En el rito latino, la Cuaresma comienza el Miércoles de Ceniza y termina justo antes de la “Misa de la Cena del Señor”, en la tarde del Jueves Santo. La duración de cuarenta días proviene de varias referencias bíblicas y simboliza la prueba de Jesús al permanecer durante 40 días en el desierto, previos a su misión pública. También simbolizan los 40 días que duró el diluvio universal, además de los 40 años de la marcha del pueblo israelita por el desierto y los 400 años que duró la estancia de los judíos en Egipto.

A lo largo del tiempo de Cuaresma, los cristianos son llamados a reforzar su fe mediante diversos actos de penitencia y reflexión. La Cuaresma tiene cinco (5) domingos más el Domingo de Ramos (seis en total), en cuyas lecturas los temas de la conversión, el pecado, la penitencia y el perdón, son dominantes. No es un tiempo triste, sino más bien meditativo y recogido. Es, por excelencia, el tiempo de conversión y penitencia del año litúrgico. Por eso, en la misa católica no se canta el “Gloria” al final del acto penitencial (excepto el jueves santo, en la misa de la cena del Señor), ni el “Aleluya” antes del evangelio. El color litúrgico asociado a este período es el morado o púrpura, asociado al duelo, la penitencia y el sacrificio a excepción del cuarto domingo que se usa el color rosa y el Domingo de Ramos en el que se usa el color rojo referido a la Pasión del Señor.

Desarrollo histórico. Existen evidencias de la existencia de prácticas cuaresmales, en particular del ayuno como preparación de la Pascua, desde fines del siglo II y principios del siglo III. Desde el año 322 existen noticias de la Cuaresma en Oriente, mientras que en Roma se celebró con seguridad al menos desde 385. En los primeros tiempos de la Iglesia, la duración de la Cuaresma variaba. Finalmente, en el siglo IV se fijó su duración en 40 días, con inicio seis semanas antes del domingo de Pascua. Por tanto, un domingo llamado precisamente «domingo de cuadragésima».

En los siglos VI-VII cobró gran importancia el ayuno como práctica cuaresmal, presentándose un inconveniente: desde los orígenes nunca se ayunó en domingo por ser día de fiesta, la celebración del Día del Señor. Para respetar el domingo y, a la vez, tener cuarenta días efectivos de ayuno durante la Cuaresma, en el siglo VII, se agregaron cuatro días más a la Cuaresma, antes del primer domingo, estableciendo los cuarenta días de ayuno, para imitar el ayuno de Cristo en el desierto. Son exactamente cuarenta los días que van del Miércoles de Ceniza al Sábado Santo, sin contar los domingos.

Calendario. La Pascua tiene mucha relación con el calendario agrícola y el tiempo de renovación de la tierra. Para calcular su celebración se toman en cuenta el sol y la luna (sol de primavera y luna llena). En ese sentido, se debe buscar el primer domingo posterior a la primera luna llena de primavera septentrional (hemisferio norte). Una vez encontrada la Pascua, se cuentan cuarenta días antes para fijar el primer día de la Cuaresma, es decir, el correspondiente al llamado “miércoles de ceniza” (los domingos, según se explica arriba, no se tienen en cuenta para hacer este cálculo).

Práctica. Según el pasaje del Libro de (Isaías 58:6-9) utilizado en celebraciones litúrgicas cuaresmales, el ayuno agradable a Dios consiste en compartir el pan con el hambriento, dejar entrar en la casa a los pobres sin techo, vestir al que se ve desnudo y no volver la espalda a los demás.

La práctica de la Cuaresma data del siglo IV, cuando se da la tendencia para constituirla en tiempo de penitencia y de renovación para toda la Iglesia, con la práctica del ayuno y de la abstinencia de ingesta de carne. Conservada con bastante vigor —al menos en un principio—en las iglesias de Oriente, la práctica penitencial de la Cuaresma se aligeró en Occidente, aunque debe observarse un espíritu penitencial, de conversión y de oración.

En el presente, más que el simple ayuno de comida, se incentivan prácticas que afectan áreas más personales de la vida: «se trata de ayunar de la comodidad, de una vida fácil, de la mínima resistencia, de la mentalidad gregaria, del placer por el placer. Y, sobre todo, se trata de ayunar del poder, la autocomplacencia y la gloria; ayunar de egoísmo, insensibilidad e inhumanidad. Es ayunar de competitividad y beneficios a costa de otros; de las formas de proceder del mundo y de los reinos construidos con la acumulación de bienes a costa de las enormes necesidades de todos los que habitan en la tierra», como forma de interpretar un pasaje bíblico utilizado en la liturgia de Cuaresma:

Ustedes ayunan entre peleas y contiendas, y para dar de puñetazos a malvados. No ayunen como hoy para hacer oír en las alturas su voz.

¿No será más bien este otro el ayuno que yo quiero? Desatar los lazos de maldad, deshacer las amarras del yugo, dar la libertad a los oprimidos, y romper toda clase de yugo. Partir tu pan con el hambriento, hospedar a los pobres sin techo, vestir al que veas desnudo y

no apartarte de tu semejante.

Entonces brotará tu luz como la aurora, y tu herida se curará rápidamente.

Te precederá tu justicia, la gloria del Señor te seguirá. Entonces clamarás, y el Señor te responderá.

Pedirás socorro, y dirá: «Aquí estoy». (Libro de Isaías 58:4,6-9).

Según san León, la Cuaresma es “un retiro colectivo de cuarenta días, durante los cuales la Iglesia, proponiendo a sus fieles el ejemplo de Cristo en su retiro al desierto, se prepara para la celebración de las solemnidades pascuales con la purificación del corazón y una práctica perfecta de la vida cristiana”.

Se trataba, por tanto, de un tiempo, introducido por la imitación de Cristo y de Moisés, en el que la comunidad cristiana se esforzaba en realizar una profunda renovación interior. El Catecismo de la Iglesia Católica retoma esta idea y la expresa de la siguiente manera: “La Iglesia se une todos los años, durante los cuarenta días de la Gran Cuaresma, al Misterio de Jesús en el desierto”.

5. SOBRE EL MIÉRCOLES DE CENIZA

El anterior al primer domingo de Cuaresma, se realiza el gesto simbólico de la imposición de ceniza en la frente de los fieles católicos. La ceniza representa la destrucción de los errores del año anterior al ser estos quemados. Mientras el sacerdote impone la ceniza dice una de estas dos expresiones: “Arrepiéntete y cree en el evangelio” (Marcos 1:15) o “Acuérdate de que eres polvo y al polvo has de volver” (Génesis 3:19).

El miércoles de cenizas, es el inicio de la cuaresma en la liturgia católica, anglicana, luterana, Gnóstica, en fin, en el mundo cristiano.

Las cenizas, nos recuerda que debemos reducir el pecado, el ego, la maldad, la negatividad, nuestro lado obscuro y tenebroso a polvareda cósmica como lo han hecho los místicos de las diferentes religiones.

6. SOBRE EL CRISTO

Ante todo, es necesario comprender a fondo lo que es realmente el Cristo cósmico. El sol físico no es más que un símbolo del sol espiritual. Cuando los antiguos adoraban al sol, cuando le rendían culto, no se referían propiamente al sol físico, se le rendía culto al sol espiritual, al sol de la media noche, al Cristo Cósmico, que vive y palpita en toda la naturaleza.

Urge saber en nombre de la verdad, que el Cristo, no es algo meramente histórico; las gentes están acostumbradas a pensar en Cristo, como un personaje histórico que existiera hace 2020 años. Tal concepto resulta equivocado, porque el Cristo no es del tiempo, el Cristo es atemporal. El Cristo se desenvuelve de instante en instante, de momento en momento. Cristo en sí mismo es el fuego sagrado, el fuego cósmico universal.

El Cristo es la parte ígnea que toda substancia orgánica e inorgánica contiene.

Si nosotros rastrillamos un cerillo, brotará el fuego; los científicos dirán que el fuego es el resultado de la combustión; más eso es falso; el fuego que brota dentro del cerillo está contenido en el cerillo, solo que con la frotación liberamos su prisión y aparece. Podríamos decir, que el fuego en sí mismo, no es el resultado de la combustión, más bien, la combustión es el resultado del fuego.

La mano que mueve el cerillo para que aparezca la llama, tiene fuego, vida, o si no, no podría moverse; después de que el cerillo se apaga la llama sigue existiendo en la cuarta dimensión.

La ciencia oficial no sabe qué cosa es el fuego. Lo utiliza, pero lo desconoce. Tampoco sabe exactamente lo que es la electricidad, por ejemplo, la utiliza, pero no la conoce. Conocemos la fórmula química del agua, pero no conocemos la fórmula química del fuego. El Cristo es la signatura astral del fuego cósmico y universal.

Debemos comprender que uno es el fuego que arde en la cocina o en un altar y otro es el fuego del espíritu, el principio activo del universo: Elohim, el Demiurgo, el Ejército de la Voz, la Gran Palabra, el Verbo. Cada uno de los constructores del universo son llamas vivas, fuego vivo, escrito está que Dios es un fuego devorador.

Conviene que entendamos que el Ejército de la Voz, el Ejército de la Palabra, es fuego y que ese fuego vivo, ese fuego viviente y filosofal que hace fecunda la materia caótica es el Cristo Cósmico, el Logos Pitagórico, el Verbo de San Juan, pero para que el Logos aparezca, para que venga a la manifestación, el Uno, debe desdoblarse en el Dos, es decir: El Padre se desdobla en la Madre, y de la unión de los dos opuestos nace el tercero, el fuego, ese fuego es el Logos, el Cristo Cósmico que hace posible la existencia del universo en la aurora de cualquier creación.

El Cristo es la poderosa mediación astral que enlaza nuestra personalidad física con la inmanencia suprema del Padre Solar.

Conviene que entendamos mejor lo que es el Cristo. Que no nos contentemos con recordar la cuestión meramente histórica. Porque el Cristo es una realidad de instante en instante; de momento en momento, es el creador. El fuego supra dimensional tiene el poder de crear los átomos y de desintegrarlos; el poder para manejar las fuerzas cósmicas universales. El fuego metafísico tiene poder para unir todos los átomos y crear universos; como también el poder para desintegrar el universo. El mundo es una bola de fuego, que se enciende y apaga según leyes.

En realidad, el fuego es crístico, tiene poder para transformar todo lo que es, todo lo que ha sido y todo lo que será. Por eso sobre la cruz verán ustedes las cuatro letras INRI: Ignis Natura Renovatur Integram, que equivale a “El fuego renueva incesantemente la naturaleza”.

Recordemos también los tres símbolos iniciáticos del Cristo: El Sol, el Rayo y el Fuego. He ahí las tres lumbreras, los tres aspectos del Logos en las siete regiones del universo.

El Cristo es una fuerza como la electricidad, como el magnetismo, un poder, un gran agente cósmico y universal. Es la fuerza eléctrica que puede originar nuevas manifestaciones. Este fuego cósmico entra en el ser humano que está debidamente preparado; en el ser humano que tenga la torre de Bel ardiendo.

En nuestro cuerpo, la torre es la cabeza y el cuello, porque el resto del cuerpo es el templo vivo. Quien ha logrado elevar el fuego sobre sí mismo, quien puede levantar el fuego crístico hasta la cabeza de hecho podrá vivir la Semana Santa dentro de sí mismo, porque la Semana Santa tenemos que vivirla dentro de nosotros mismos, en la gran obra, en nuestra iniciación.

Es la fuerza del Cristo Cósmico ardiendo dentro de nosotros mismos, quien nos transformará totalmente; una vez que el fuego arda dentro de nosotros, seremos cambiados totalmente, seremos convertidos en criaturas plenamente diferentes y entonces gozaremos de la iluminación plena y de los poderes cósmicos.

Cristo es el Logos Solar, la Unidad Múltiple Perfecta, Cristo es la vida que palpita en el universo entero, es lo que es, lo que siempre ha sido y lo que siempre será. El Cristo Íntimo, el fuego celestial, debe nacer en nosotros y nace en realidad cuando hemos avanzado bastante en el trabajo psicológico sobre sí mismo.

El fuego viviente y filosofal, el Cristo Íntimo, es el fuego del fuego, lo puro de lo puro. El Cristo Íntimo debe eliminar de nuestra naturaleza psicológica las mismas causas del ego.

El fuego crístico nos envuelve y nos baña por todas partes, viene a nosotros a través de todos los elementos de la naturaleza que son sus conservadores y sus diversos vehículos. Ese fuego celestial debe cristalizar en nosotros, es el Cristo Íntimo, nuestro Salvador interior profundo. El Señor Íntimo debe hacerse cargo de toda nuestra psiquis.

En el oriente al Cristo se le llama Vishnú. Esta palabra sanscrita viene de la raíz Vish que significa: penetrar. El Cristo puede penetrar profundamente en el organismo humano para quemar las escorias que tenemos dentro, a esto se le llama Cristificarse. Ese fuego cósmico entra en el ser humano que está debidamente preparado a todo nivel: físico, emocional, mental, volitivo, conscientivo, anímico y espiritual.

Así el Cristo, el Señor Nuestro, el Hijo del Hombre, desciende; quiere entrar en cada uno de nosotros para transformarnos, para salvarnos, para quebrantar a esos agregados psicológicos que en nuestro interior llevamos, para hacer de nosotros algo distinto, para eliminar al ego y para convertirnos en iluminados y auténticos cristianos.

Tenemos que aprender a ver al Cristo, no desde el punto de vista meramente histórico, sino como Espíritu del Fuego, como una realidad presente, como INRI.

Así el Cristo, el Señor Nuestro, el Espíritu del Fuego, desciende; quiere entrar en cada uno de nosotros para transformarnos, para salvarnos, para quebrantar a esos agregados psíquicos que en nuestro interior llevamos, para hacer de nosotros algo distinto, para convertirnos en Dioses.

Jesús de Nazaret fue el gran Maestro súper trascendido que encarnó al Cristo Cósmico.

Inútilmente habrá sido crucificado y muerto, y resucitado en la Tierra Santa, sino nace, muere y resucita también en nosotros.

El Cristo Cósmico es una energía cósmica y universal, es fuego, luz y amor. El Cristo Íntimo es nuestro Real Ser, Atman, el Maestro interno, Ser esencial.

El Cristo en substancia son los átomos ígneos depositados en toda semilla y en nuestra simiente

El Cristo Secreto, el Cristo Vivo, el Cristo Íntimo tiene que escribir su doctrina en forma muy distinta, lo público para el público, pero la enseñanza secreta solamente la enseña a los que herméticamente instruye, nada más, porque de lo contrario no sería entendido. He allí el uso de las parábolas. Hay necesidad de comprender cada vez más lo que es el Cristo íntimo. Las gentes todas piensan en el Cristo histórico, en el Gran Kabir Jesús, en el superhombre que enseñó a la humanidad la doctrina secreta de encarnar al Cristo Íntimo.

A nosotros nos toca seguir la doctrina del Cristo Íntimo, conocer los misterios del Cristo Secreto; el Cristo vivo es lo que cuenta, ese Cristo Íntimo tiene que nacer en el corazón del ser humano, porque ¿De qué serviría que el Cristo naciera en Belén, si no nace en nuestro corazón también? ¿De qué serviría que fuera muerto y resucitado, si no muere y resucita en nosotros también?

Es necesario pues, que la fuerza Crestos nazca en el corazón del ser humano, pero para eso tiene uno que hacerse hombre primero que todo, tiene uno que trabajar sobre sí mismo, destruyendo sus defectos y construyendo sus cuerpos internos. Después de que se ha hecho hombre y hombre de verdad, entonces tiene la dicha de poder encarnar a su Cristo Íntimo o de recibir al Cristo.

Así es el acontecimiento de Belén. El Cristo encarnado en el corazón del hombre es lo que cuenta; pero ese Cristo Íntimo tiene que vivir todo el Drama Cósmico, tal como está estipulado en los 4 evangelios, tiene que vivirlos dentro de sí mismo, aquí y ahora, vivir intensamente los 4 evangelios; y luego que haya pasado por todos esos procesos, entonces tiene que ser juzgado, muerto, sepultado y resucitado.

7. SOBRE EL DRAMA CÓSMICO:

El acontecimiento de la historia Crística no es de ayer, es de ahora, es presente; no meramente un pasado, como creen los ignorantes ilustrados. Pero aquellos que comprendan, trabajarán para la cristificación. Mucho se ha dicho sobre el Drama Cósmico; incuestionablemente este drama está formado por los 4 evangelios. Fue traído por los Elohim a la Tierra; el Gran Kabir Jesús el Cristo también hubo de representar el mismo drama públicamente en la Tierra Santa. Aunque Cristo nazca mil veces en Belén, de nada sirve si no nace en nuestro corazón también. Aunque hubiese muerto y resucitado al tercer día de entre los muertos, de nada sirve eso si no muere y resucita en nosotros también.

Así pues, que hay necesidad de trabajar, pero trabajar de verdad, dentro de uno mismo, aquí y ahora, para poder lograr lo que hay que lograr, la Cristificación en uno mismo, aquí y ahora. Tiene uno que romper con los prejuicios de la época, trabajar como se debe trabajar; solo así se puede levantar. El Cristo Íntimo tiene su círculo esotérico y jamás podría enseñar la doctrina del súper hombre, porque las gentes, las multitudes, no entienden la doctrina del superhombre. El Cristo nunca publica sus enseñanzas esotéricas; si las publicara, las gentes no las entenderían, entonces se destruirían unas con otras.

El Cristo Secreto, el Cristo Vivo, el Cristo Íntimo tiene que escribir su doctrina en forma muy distinta, el público para el público, pero las enseñanzas secretas solamente la enseñan a los que herméticamente instruye, nada más, porque de lo contrario no sería entendido. He allí el uso de las parábolas. Hay necesidad de comprender cada vez más lo que es el Cristo Íntimo. Las gentes todas piensan en el Cristo histórico, en el Gran Kabir Jesús, en el súper hombre que enseñó a la humanidad la doctrina secreta del Cristo Íntimo.

A nosotros nos toca seguir la doctrina del Cristo Íntimo, conocer los misterios del Cristo Secreto; el Cristo Vivo es lo que cuenta, ese Cristo Íntimo tiene que nacer en el corazón de cada ser humano, porque ¿De qué serviría que el Cristo naciera en Belén, si no nace en nuestro corazón también? ¿De qué serviría que fuera muerto y resucitado, si no muere y resucita en nosotros también?

Es necesario pues, que la fuerza Crestos nazca en el corazón del ser humano, pero para eso tiene uno que hacerse hombre primero que todo, tiene uno que trabajar sobre sí mismo, destruyendo sus defectos y construyendo sus cuerpos internos. Después de que se ha hecho hombre y hombre de verdad, entonces tiene la dicha de poder encarnar al Cristo Íntimo o de recibir al Cristo.

Así es el acontecimiento de Belén. El Cristo encarnado en el corazón del ser humano es lo que cuenta; pero ese Cristo Íntimo tiene que vivir todo el Drama Cósmico, tal como está estipulado en los 4 evangelios, tiene que vivirlos dentro de uno mismo aquí y ahora, vivir intensamente los 4 evangelios y luego que haya pasado por todos esos procesos entonces tiene que ser juzgado.

Los iniciados y adeptos de todas las edades, los Maestros iluminados de todos los siglos, han tenido que vivir el Drama Cósmico dentro de sí mismos, aquí y ahora.

Empero, Jesús el Gran Kabir tuvo el valor, la grandeza y la misión de representar tal drama Íntimo públicamente, en la calle y a la luz del día, para abrir el sentido de la iniciación espiritual a todos los seres humanos, sin diferencia de raza, sexo, casta o color. Es maravilloso que haya habido alguien que en forma pública enseñara el Drama íntimo a todos los pueblos de la Tierra.

Mucho se ha dicho sobre el Drama Cósmico; incuestionablemente, este Drama está formado por los cuatro evangelios. Se sucede en el mundo físico en la vida diaria del iniciado; en su vida personal, económica, familiar, conyugal, salud, enfermedad, etc. Se sucede también en lo interno, en sus experiencias del astral, del mental, etc. Todo esto Fue representado por las escuelas esotéricas a puerta cerrada y Jesús el Cristo lo sacó a la calle públicamente para ser visto por toda la humanidad. Esa fue su misión. La encontramos en el vía crucis formado por 14 estaciones. 1 + 4 = 5. Es decir, muy apegado y de acuerdo a la ley divina.

Se nos ha dicho que el Drama Cósmico fue traído por los Elohím a la Tierra; el Gran Señor de la Atlántida representó ese Drama en carne y hueso.

El Gran Kabir Jesús también hubo de representar el mismo Drama públicamente en la Tierra Santa.

Indubitablemente el citado drama se ha vivido siempre secretamente en las profundidades de la conciencia superlativa del Ser.

No es el drama cósmico propiedad exclusiva del Gran Kabir Jesús como suponen siempre los ignorantes ilustrados.

El drama cósmico lo vive el iniciado en su vida física, en su vida diaria, lo vive en su mundo psicológico y también lo vive en los mundos internos, astral, mental, causal, Atman. Se dramatizaba o representaba este drama cósmico dentro de las escuelas esotéricas con sus iniciados. Y Jesús lo representó en la calle, en la vía pública.

8. SOBRE EL NÚMERO 3:

La Semana Santa tiene raíces esotéricas muy hondas. Veamos por ejemplo el número 3. Lo encontramos en las 3 mujeres, las 3 caídas, las 30 monedas de plata, las 3 veces que Pedro negó al Cristo antes que cantara el gallo, los 3 traidores, las 3 cruces, los 3 clavos, la muerte de nuestro Señor a las 3 de la tarde, a los 33 años, resucitó a los 3 días. Comprendamos que la repetición del número 3 a través de toda la pasión, muerte y resurrección del Cristo, no es una casualidad, no es una coincidencia. Esto conlleva una enseñanza muy profunda y espiritual.

La ley del 3 es la ley creadora. Nada nuevo nace sin la unión de las 3 fuerzas primarias en un punto dado. El iniciado nace y se hace trabajando con la ley del 3. La enseñanza del número 3 es trabajar con la ley del 3 para crear al iniciado, al nuevo Hombre. Con la cruz.

9. SOBRE EL NÚMERO 7:

Si examinamos el libro sagrado de la Biblia, (que no es un libro de historia, sino un libro sagrado de cábala y alquimia) vemos que al inicio se encuentra el Génesis, aparecen allí los 7 días de la creación, al inicio de todo. Si también examinamos al final el Apocalipsis encontraremos los 7 sellos. Ese mismo simbolismo del 7 se encuentra entonces en la Semana Santa, representado los 7 días santos. Justo en el medio del Génesis y del Apocalipsis. Entonces encontramos también el número 3: Génesis, al inicio; Semana Santa en medio y el Apocalipsis al final.

Recordemos las 7 notas musicales, los 7 colores del arco iris, los 7 tipos de materia, las 7 capas del átomo, las medidas antropométricas, los 7 sacramentos de toda iglesia, las 7 palabras del Cristo antes de morir, las 7 dimensiones del universo, etc.

Diremos nosotros entonces que el número 7 es un número santo. Representa a la sagrada ley del 7, que sostiene, ordena, organiza y limita a toda la creación, a todo lo creado.

La Semana Santa es profundamente significativa. Recuerden los 3 y 7 pasos de la masonería.  El Cristo o sea la fuerza Crística debe arder primero que todo en el cuerpo físico, debe avanzar en el cuerpo etérico, debe proseguir su camino por la senda astral, debe continuar su viaje por el mundo mental, debe luego llegar al cuerpo causal, debe proseguir su ascenso por el alma y por último en el séptimo día habrá llegado al mundo del espíritu, entonces el iniciado recibirá la resurrección que lo transformará e iluminará radicalmente.

Vemos aquí con toda claridad el simbolismo de los 7 días de la Semana Santa. El cristianismo tiene dos aspectos a saber: El aspecto público o exotérico para el pueblo y el cristianismo esotérico sagrado para los iniciados. En lo exotérico o público se entregan las tradiciones, los símbolos sin develar; sin sus significados, enseñanzas o misterios.

Debemos buscar un cristianismo más esotérico, más profundo; no conformarnos con las formas externas sino buscar esas enseñanzas contenidas detrás de los símbolos.

10. SOBRE EL DOMINGO DE RAMOS:

El Domingo de Ramos celebramos la magistral entrada del Gran Kabir Jesús en Jerusalén (Mateo 23). Este pasaje se relaciona directamente con los aspectos inferiores y superiores del mundo mental del iniciado. Es indispensable pasar más allá del cuerpo de los afectos y de la mente cuando se quiere alcanzar la entrada triunfal en la Jerusalén de la mente.

“Y como se acercaron a Jerusalén, y vinieron a Bethfagé; al Monte de los Olivos, Jesús envió dos discípulos, diciéndoles:” “Id a la aldea que esta delante de vosotros, y luego hallaréis una asna atada, y un pollino con ella; desatadla, y traédmelos”.

“Y si alguno os dijere algo, decid: El Señor los ha menester. Y luego los dejará”.

“Y todo esto fue hecho, para que se cumpliese lo que fue dicho por el Profeta, que dijo: Decid a la Hija de Sion: He aquí, tu Rey viene a ti, manso, y sentado sobre una asna, (símbolo de la Mente).

Y sobre un pollino, hijo de animal de yugo”.

“Y los discípulos fueron, e hicieron como Jesús -el Gran KABIR- les mandó”;

“Y trajeron el asna y el pollino, y pusieron sobre ellos sus mantos; y Él se sentó sobre ellos”.

“Y la compañía, que era muy numerosa, tendía sus mantos en el camino; y otros cortaban ramos de los árboles y los tendían por camino -esotérico-“.

“Y las gentes que iban delante -en la senda del filo de la navaja – y los que iban detrás -en el esotérico sendero -, aclamaban, diciendo: ¡Hosanna al Hijo de David! ¡Bendito el que viene en nombre del Señor! ¡Hosanna en las alturas!”.

“Y entrando Él en Jerusalén, toda la ciudad se alborotó, diciendo: ¿Quién es éste?”. “Y las gentes decían: Este es Jesús, el Profeta, de Nazaret de Galilea”.

“Y entró Jesús en el Templo de Dios -el Templo que cada uno de Nos lleva dentro – y echó fuera a todos los que vendían y compraban en el templo, -los mercaderes, los Yoes que personifican a nuestros defectos de tipo psicológico -, y trastornó las mesas de los cambiadores

-Demonios que adulteran todo lo bueno – y las sillas de los que vendían palomas; (Diablos que venden al Tercer Logos, que comercian profanando al Espíritu Santo: Fornicarios, Prostitutas, Lesbianas, adúlteros, homosexuales)”.

“Y les dice: Escrito está: Mi casa, casa de oración será llamada, más vosotros cueva de ladrones la habéis hecho”. (Así la mente de cada persona es guarida de perversidad).

“Entonces vinieron a Él ciegos y cojos en el templo, y los sanó”. (gentes incapaces de ver la verdad y sujetos que no podían andar el camino).

“Más los príncipes de los sacerdotes y los escribas -o intelectuales -, viendo las maravillas que hacía, y a los muchachos aclamando en el templo y diciendo: ¡Hosanna al Hijo de David!, se indignaron”.

“Y le dijeron: ¿Oyes lo que éstos dicen? Y Jesús les dijo: Sí, Nunca leísteis: ¿De la boca de los niños y de los que maman perfeccionaste la alabanza?”.

El Cristo entra triunfal a Jerusalén montado en una asna. El símbolo hermético de la mente sensual, de la mente terrena es el asno. La mente humana sin ningún control, sin ninguna disciplina y sin ninguna purificación es terca, necia, obstinada, obsesiva y viene a ser la cueva donde llevamos los peores yoes, pasiones inconfesables, delitos, robos, adulterios, miedos, etc.

El ser humano lleva en la mente lo más perverso de su naturaleza. Es la cueva del ego. La meditación es la práctica clásica para trascender a la mente sensual.

Toda persona que ha intentado un trabajo de meditación o relajación encuentra esa terrible realidad de que nuestra mente es una cueva de bandidos y es allí donde encontramos los mayores obstáculos para despertar nuestra consciencia. El día que superemos la adicción a estar pensando todo el tiempo, despertaremos consciencia. El pensamiento es compulsivo, repetitivo.

Incuestionablemente sólo mediante el Cristo Ígneo podremos vencer al ego, a todos esos agregados psicológicos perversos que llevamos dentro en la mente terrena, para entrar a la Jerusalén celestial en Domingo de Ramos.

Pasar más allá del cuerpo, de los afectos y de la mente, es indispensable cuando se quiere la entrada triunfal en la Jerusalén de arriba. (El Cielo de Mercurio y después el Mundo del Espíritu).

 

11. SOBRE LOS 3 TRAIDORES

Los 3 traidores lo condenan. Judas, Pilatos y Caifás son los tres traidores del Drama Cósmico. Incuestionablemente cada uno de nosotros lleva en su interior psicológico a los tres traidores; estos odian mortalmente al Cristo Secreto y le conducen a la muerte dentro de nosotros mismos y en nuestro propio espacio psicológico.

Los tres traidores que crucificaron al Cristo, que lo llevan a la muerte, están dentro de nosotros mismos; los Masones los conocen, los Gnósticos también los conocemos: Judas, Pilatos y Caifás. Judas es el demonio del deseo, que nos atormenta. Pilatos es el demonio de la mente, que para todo tiene disculpas. Caifás, es el demonio de la mala voluntad, quien prostituye el altar.

Esos son los tres traidores que entregan al Cristo por treinta monedas de plata. Las treinta monedas representan todos los vicios y pasiones de la humanidad… cambian al Cristo por las botellas en la cantina, cambian al Cristo por el prostíbulo, o por el lecho de Procusto, cambian al Cristo por el dinero, por las riquezas, por la vida sensual, lo venden por treinta monedas de plata. Son de plata que es el metal de la luna y el ego es lunar.

Estos tres traidores crucifican al Señor de Perfecciones en el fondo mismo de nuestra alma. Se trata de tres tipos específicos de elementos inhumanos fundamentales en el drama cósmico.

12. SOBRE JUDAS:

Judas simboliza el demonio del Deseo que cambia siempre al Cristo Íntimo por 30 monedas de plata. (3 + 0 = 3). Estas monedas de plata representan todo lo mundanal, todos los vicios y pasiones de la humanidad. Cambian al Cristo por las botellas en las cantinas, por el prostíbulo, lo cambian por el dinero, las riquezas, poder, las ambiciones, por la vida sensual, fama, vanidades, lo venden por 30 monedas de plata. La plata es el metal de la luna, es lunar, el ego es lunar mientras el Cristo es solar.

Todos tenemos nuestro Judas. El Deseo cuando no logramos satisfacerlo nos hace sentir frustrados, desesperados, etc. Y si logramos satisfacerlo después de un tiempo se harta, se hastía y salta a un nuevo deseo. Total, nunca tendremos paz interior.

La muerte de Judas, ahorcándose, nos enseña con toda claridad que debemos decapitar, eliminar de nuestra naturaleza psicológica a todos esos elementos negativos y perversos. Judas es el demonio del deseo y debemos eliminarlo de una vez y para siempre, a todo nivel. Judas simbolizando lo bajo, traidor y mundanal debe morir. Este es el evangelio de Judas, esta es la decapitación budista de que se habla en el oriente. La eliminación radical del Ego. Cada yo que conforma al ego tiene su deseo.

Históricamente, Judas Iscariote, realmente no quería el papel de Judas, él quería el papel de Pedro, pero Jesús preparó a Judas para el Drama que tenía que representar, y Judas lo representó a la maravilla.

Pero Judas Iscariote jamás traicionó a Jesús. Tuvo que aprenderse de memoria todo lo que corresponde al evangelio de Judas.

Para poder comprender el evangelio de Judas, bien, hay que estudiar a Zacarías. Ahí se mencionan las treinta monedas de plata, con que fue apreciado y despreciado, etc. El dinero que se utilizó para comprar un terreno para los difuntos, etc. Todo eso está; el tipo de moneda; y todo eso está escrito en Zacarías. De manera que Judas tuvo que aprenderse todo eso, revisar las sagradas escrituras y hacer bien su papel. Pero, él, que tenga algo de traidor, ¡nada! Fue un papel que le enseñó Jesús, y que él no quería, además.

De manera que el Maestro Judas tiene un evangelio: ¡La disolución del ego!

Renunció él mismo a toda felicidad y vive actualmente en los mundos infiernos, trabajando por los perdidos, por los que no tienen remedio.

De manera que el único que no ha recibido honores, que ha sido odiado, insultado y que sin embargo ama a la humanidad, puesto que se sacrificó por la humanidad y entregó hasta su misma vida sin una palabra de alabanza. No ha habido sino insultos, desde que él cumplió su Drama hasta la presente época.

Primero comenzamos con el beso, nos identificamos, nos olvidamos de sí mismos y terminamos entregando a nuestro Cristo Íntimo con la fornicación.

13. SOBRE PILATOS

Pilatos simboliza el demonio de la Mente, esa mente terrena, esa mente sensual que siempre se lava las manos, siempre se declara inocente, nunca se auto responsabiliza, constantemente se justifica ante sí misma y ante los demás, busca evasivas, escapatorias para eludir sus propias responsabilidades, siempre tiene excusas, pretextos, justificaciones para no realizar el trabajo espiritual en forma decidida. Se siente víctima. Pilatos le hace poner la corona de espinas en sus sienes; los malvados yoes le flagelan, le insultan, le maldicen en el espacio psicológico íntimo, sin piedad de ninguna especie. Pilatos siempre justifica sus peores perversidades, busca evasivas, disculpas, no hace frente a sus errores. La mente sensual e intermedia nos mantiene dormidos con el pensamiento compulsivo, repetitivo, inútil y mecánico.

14. SOBRE CAIFÁS

Caifás simboliza el demonio de la mala voluntad que traiciona incesantemente al Señor dentro de nosotros mismos: el Adorable Íntimo le da el báculo para pastorear sus ovejas, sin embargo, el cínico traidor convierte el altar en lecho de placeres, fornica incesantemente, adultera, vende los sacramentos, etc. La mala intencionalidad. Por mala voluntad dejamos de hacer un bien pudiendo hacerlo y ganamos karma. Caifás tenía el poder y la autoridad para absolverlo y liberarlo y no lo hace porque le tenía mala voluntad.

15. SOBRE LOS MERCADERES DEL TEMPLO

Leamos el capítulo 21 de Mateo. Y entró Jesús en el templo de Dios que es el templo que cada uno de nos lleva dentro y echó fuera a todos los que vendían y compraban en el templo, es decir los mercaderes, el ego, los yoes que personifican a nuestros defectos de tipo psicológico y volcó las mesas de los cambiadores, los yoes que adulteran todo lo bueno y las sillas de los que vendían palomas, es decir los yoes que venden al Espíritu Santo, que comercian profanando al Espíritu Santo, yoes de adulterios, de fornicaciones, de todo tipo de degeneración sexual, etc.

Y les dijo: “Escrito está, mi casa, casa de oración será llamada, más vosotros cueva de ladrones la habéis hecho”. Porque realmente la mente de cada persona es guarida de perversidad. Entonces vinieron a Él ciegos y cojos en el templo y los sanó. Esto se refiere a las gentes incapaces de ver la verdad y sujetos que no podían andar en el camino iniciático.

16. SOBRE LA ÚLTIMA CENA

En la última cena encontramos la institución del sacramento de la eucaristía. La consagración del pan y del vino. La integración de los cuerpos astrales de nuestro Señor el Cristo con sus 12 discípulos a través del pan y del vino para toda una eternidad. (Mateo 26:17-29).

Se critica que en la última cena no aparece ninguna mujer. El Eterno Femenino esta representado por el santo grial, ya que cada uno de los trece allí presentes tenía a su atanor alquímico o sea a su esposa sacerdotisa.

17. SOBRE EL LAVATORIO DE PIES

El lavatorio de pies, donde se limpia, estimula y abre el chakra prostático, desde un vórtice de los pies. Purificación por el agua. Con humildad. El Cristo Íntimo nos limpia y purifica por medio de las aguas de vida. La sangre del cordero lava los pecados del mundo. El Cristo Íntimo sin ser pecador tiene que limpiar, lavar y eliminar todos los pecados (yoes) del iniciado.

Se consagran los santos óleos, que servirán para todo el año.

18. SOBRE EL SANTO GRIAL

Es incuestionable que, para Richard Wagner, como para todos los países cristianos en general, el Grial es “El Vaso Sagrado” del que el Señor de Perfección había bebido en su Última Cena: La Divina Copa que había recibido su sangre real vertida desde la cruz en el Monte de las Calaveras y recogida devotamente por el senador romano José de Arimatea.

El Gran Cáliz fue poseído por el Patriarca Abraham; Melchisedek, el Genio Planetario de nuestro mundo, lo transportó con infinito amor del país de Semiramis a la tierra de Chanaam, cuando inició algunas fundaciones en el lugar que más tarde estuvo Jerusalén, la ciudad querida de los profetas; lo utilizó sabiamente cuando celebró el sacrificio en que ofreció el pan y el vino de la transubstanciación en presencia de Abraham, y se lo dejó a este Maestro. También estuvo este Vaso Santo en el Arca de Noé…

Se nos ha dicho que esta Copa venerada fue llevada también a la tierra sagrada de los faraones, al país asoleado de KEM y que Moisés, el jefe de los Misterios Judíos, el Gran Hierofante iluminado, la poseyó…

Antiquísimas tradiciones milenarias que se pierden en la noche aterradora de todas las edades, dicen, que este Vaso Mágico estaba hecho de una materia singular, compacta como la de una campana y no parecía haber sido trabajada como los metales; más bien parecía producto de una especie de vegetación…

El Santo Grial es el Cáliz milagroso de la suprema bebida; el Vaso donde está contenido el Mana que alimentaba a los Israelitas en el desierto; el YONI, el ÚTERO del eterno femenino…

En esa copa de delicias está contenido el Vino exquisito de la espiritualidad trascendente…

La conquista del “ULTRA-MARE-VITAE” o “MUNDO SUPERLIMINAL” y “ULTRA-

TERRESTRE”, la Resurrección esotérica, serían algo más que imposible sin la MAGIA SEXUAL, sin la mujer, sin el amor…

La “Piedra de Luz”, el “Santo Grial”, tiene el poder de resucitar a HIRAM ABIF el Maestro Secreto, el Rey Sol, dentro de nosotros mismos, aquí y ahora…

El Grial conserva el carácter de un “MISTERIUM TREMENDUM”. Es la piedra caída de la Corona de Lucifer…

Como fuerza temible, el Grial hiere y destruye a los curiosos e impuros, pero a los justos y sinceros les defiende y da vida…

Incuestionablemente el Grial sólo puede lograrse mediante la Lanza de Eros, combatiendo contra los eternos enemigos de la noche…

19. SOBRE JESÚS ORA EN EL MONTE DE LOS OLIVOS

Pasemos ahora a otro profundo pasaje en la noche del Jueves Santo. El Gran Kabir Jesús, en el monte Olivetti, oró así: “Padre mío, si es posible pasa de mí este cáliz, mas no se haga mi voluntad sino la tuya”.

Hacer la voluntad del Padre interno así en los cielos como en la Tierra, morir en el Señor, es el hondo significado de tal símbolo. La aceptación y la rendición incondicional al momento presente.

Aquí este pasaje tiene que ver con los trabajos herméticos con el cuerpo de la voluntad del iniciado. Pruebas sobre la voluntad, purificaciones en el cuerpo causal o de la voluntad. Desarrollar la voluntad significa desarrollar el poder de crear y generar nuevas circunstancias en la vida. No ser más víctima de las circunstancias, romper la mecanicidad de la vida, transcender lo automático y estereotipado de nuestras reacciones. Aceptación con comprensión, rendición. Fluir con la vida concientemente.

¿Habéis visto los sarcófagos egipcios? Los brazos de los difuntos cruzados en aspas sobre el pecho. ¿Habéis visto las imágenes del Corazón de Jesús con sus dos brazos cruzados en aspas sobre el pecho? Simbolizan precisamente lo mismo. Cualquier cráneo entre dos canillas o huesos de muerto, como señal de peligro o al pie del crucifijo, dice lo mismo: “Hacer la voluntad del Padre así en los cielos como en la Tierra”.

“Y estando en agonía, oraba más intensamente. Y fue su sudor como grandes gotas de sangre que caían hasta la tierra”. Y como se levantó de la oración y vino a sus discípulos hállalos durmiendo de tristeza. Esto es con la consciencia dormida. Y les dijo: “¿Por qué dormís? Levantaos y orad, para que no entréis en tentación”. Porque los dormidos, es claro que caen en tentación por falta de consciencia. El espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil”. Aquí Jesús el Cristo de nuevo nos llama a despertar consciencia de momento en momento. Solo viviendo alertas, atentos, vigilantes, observantes en el aquí y ahora podremos dejar de cometer tantos errores. Podemos leer el Evangelio de (Mateo 26:30-46).

Cuando Jesús se separa del grupo a orar, no es que simplemente no quiere orar con ellos, sino Jesús sube a la dimensión del mundo causal y allí ve lo que le espera al siguiente día, ora y clama intensamente y cada vez que vuelve al mundo físico, los encuentra dormidos y así por tres veces.

Todas estas enseñanzas herméticas tienen que ver con la formación de la Voluntad Cristo dentro del adepto. La creación y cristificación del cuerpo causal. Todo esto conlleva pruebas, purificaciones, disciplinas y padecimientos voluntarios dentro del mundo causal. Nuestra consciencia debe permanecer siempre alerta y vigilante como el vigía en época de guerra para no caer en tentación y hacer la voluntad del Padre en nuestra vida diaria. Llamarnos al despertar de conciencia. El espíritu es fuerte, pero la carne es débil.

20. SOBRE LA NEGACIÓN DE PEDRO

También está escrito: “De cierto te digo que esta noche antes que el gallo cante, me negarás tres veces. Pedro le dijo: Aunque me sea necesario morir contigo, no te negaré. Y todos los discípulos dijeron lo mismo”. (Mateo 26:34-35).

Incuestionablemente, “derramar el Vaso de Hermes”, prostituir la Piedra de la Verdad, equivale a negar al Cristo…

Pedro, la piedra bruta y rustica, simboliza el sexo sin ninguna disciplina ni trabajo. Pedro, el sexo, niega al Cristo antes del despertar de conciencia, antes del canto del gallo. Todos negamos a nuestro Cristo Íntimo antes de conocer el despertar de conciencia. Esto tiene que cambiar, necesitamos negar al ego y reafirmar al Cristo. 

 

21. SOBRE EL GALLO

Representa al Verbo, al Logos Solar, la Palabra. El canto del Gallo representa un nuevo amanecer, el despertar de la consciencia. “Antes de que el gallo cante”, significa: antes de encarnar al Verbo, al Cristo Íntimo en nosotros, me negarás tres veces. Cuando el hierofante Pedro se olvidó de sí mismo, negó a su Cristo Íntimo tres veces.

Recordemos que Pedro es Piedra. La piedra angular para construir el templo interior profundo. Incuestionablemente, prostituir la Piedra de la Verdad, degenerarnos y perder toda posibilidad de crear los cuerpos solares, equivale a negar al Cristo Íntimo. ¡Cuánto lloró amargamente Pedro, después de haberlo negado tres veces!

“Antes que el gallo cante, me negarás tres veces”. Debemos negarnos a sí mismos, purificarnos, morir en sí mismos en lo mundanal, morir para el mundo, antes de encarnar al Logos, al Verbo; esto es antes de que cante el Gallo.

En verdad, en verdad os digo que vuestra conciencia debe permanecer siempre alerta y vigilante como el vigía en época de guerra.

Escrito está: “Antes que el Gallo (El Verbo) cante (o se encarne en nosotros), me negarás tres veces”. Cuando el Hierofante “PATAR” o PEDRO se olvidó de sí mismo, negó al Cristo ÍNTIMO tres veces.

PEDRO, PETRA O PIEDRA, era el propio Hierofante o el intérprete en Fenicio, y de aquí la famosa frase evangélica: “Tú eres PEDRO y sobre esta PIEDRA edificaré mi Iglesia” (nuestro Templo Interior). Negamos al Verbo antes de que cante el gallo, antes del despertar.

En modo alguno se equivocaron jamás los viejos alquimistas medievales, cuando descubrieron la “Pétera Iniciática” en nuestros órganos sexuales…

Incuestionablemente, “derramar el Vaso de Hermes”, prostituir la Piedra de la Verdad, equivale a negar al Cristo… el Gallo también representa la potencia sexual del iniciado.

Necesidad de despertar y necesidad de aprovechar la energía sexual para despertar mismo.

22. SOBRE QUIENES ODIAN Y CRUCIFICAN AL CRISTO

No olviden ustedes que cada vez que el Señor de Compasión viene al mundo, es odiado por tres clases de seres humanos:

Primero: Por los ancianos, las gentes llenas de experiencias que dicen: ¡Ese hombre está loco, vean lo que trae, no oigan lo que está diciendo, no está de acuerdo con nosotros, con lo que pensamos, con las buenas costumbres, con nuestras tradiciones, tenemos experiencia, este hombre perjudica, daña!

Los ancianos, es decir, los moradores de la Tierra, los buenos dueños de casa sin anhelos espirituales, los fariseos, la gente juiciosa, la gente de experiencia, aborrecen al Logos, al Cristo Secreto, al Cristo de la Gran Rebelión, porque este se sale del mundo de sus hábitos y costumbres anticuadas, reaccionarias, rancias y petrificadas de muchos ayeres. El sistema establecido, el statuo quo, la clase política.

Segundo: es rechazado por los escribas, es decir por los intelectuales de la época. Cada vez que el Señor de Gloria ha venido al mundo, los intelectuales has estado en contra de Él. Lo odian mortalmente, porque no encaja dentro de sus teorías, significa peligro para su sistema, para sus sofismas. Los escribas del templo, los bribones del intelecto aborrecen al Cristo Íntimo porque este es la antítesis del Anticristo, el enemigo declarado de todo ese podridero de teorías seudocientíficas materialistas, enemigo de la falsa ciencia, que tanto abunda en los mercados de cuerpos y almas.

Tercero: Por los sacerdotes de la época, porque todos ellos ven en Él un peligro para su respectiva secta. No lo comprenden, quieren que el Señor de Perfecciones, el Cristo Vivo, viva exclusivamente en el tiempo de acuerdo con sus dogmas inquebrantables, creencias, tradiciones, costumbres, de acuerdo con sus intereses sectarios y estrechos.

Estas son las tres clases de seres humanos de la época que odian mortalmente al Cristo Vivo, Íntimo, cada vez que se encarna en un iniciado y se manifiesta públicamente.  Ellos le conducen a la muerte dentro de nosotros mismos y en nuestro propio espacio psicológico.

Así que en nombre de la verdad decimos, que el Cristo es tremendamente revolucionario, rebelde, es el fuego supra divinal que viene a quemar todas las podredumbres que cargamos dentro. Es el fuego que viene a reducir a cenizas nuestros prejuicios, nuestros preconceptos, nuestros intereses creados, nuestras abominaciones y hasta nuestras experiencias de tipo personal. Es nuestro Salvador Salvandus, es nuestro salvador porque nos salva de toda la perversión del ego, nos salva desde adentro, nos salva eliminando al ego, nos salva del ego.

23. SOBRE EL JUICIO DE JESÚS

“Y luego, aun hablando Él, vino Judas, que era uno de los doce, y con él una compañía con espadas y palos, de parte de los Príncipes de los Sacerdotes, (u hombres constituidos por autoridad mundana), y de los escribas (o sea de los tenidos por sabios en el mundo, intelectuales), y de los ancianos (los tenidos en el mundo por prudentes, sensatos y discretos, hombres de experiencia)”. (Marcos 14:43).

“Y como vino Judas (el Demonio del Deseo), se acercó a Él, y le dijo: Maestro. Y lo besó”. “Entonces ellos echaron en Él sus manos, y lo prendieron”.

Embriagado de éxtasis exclamé: ¡Yo Soy el Cristo! Una DAMA-ADEPTO me amonestó, diciendo: ¡Cuidado! No digas eso, es falta de respeto”.

En estos momentos lo estoy representando, repliqué. La Dama Sagrada guardó entonces un respetuoso silencio.

El Drama Cósmico dentro del templo de las paredes transparentes, tuvo cierto sabor mayéstico, muy grave, terriblemente Divino…

Convertido yo en el personaje central hube de experimentar en mí mismo los siguientes pasajes evangélicos:

“Y trajeron a JESÚS al Sumo Sacerdote: Caifás (el Demonio la Mala Voluntad) y se juntaron a él todos los Príncipes de los Sacerdotes (las autoridades oficiales de este mundo) y los ancianos (las personas muy respetables y llenas de experiencia) y los escribas (los intelectuales)”.

“Y los Príncipes de los Sacerdotes y todo el Concilio buscaban testimonio contra JESÚS (el Interno Salvador), para entregarlo a la muerte, mas no lo hallaban”.

“Porque muchos decían falso testimonio contra Él, más sus testimonios no concertaban”. “Entonces, levantándose unos, dieron falso testimonio contra Él, diciendo:”

“Nosotros le hemos oído decir: Yo derribaré este templo que es hecho de mano (refiriéndose al Cuerpo animal) y en tres días edificaré otro hecho sin mano” (el Cuerpo Espiritual, el TO SOMA HELIAKÓN).

“Más ni aun así se concertaba el testimonio de ellos”.

“Entonces, el Sumo Sacerdote (con su Mala Voluntad), levantándose en medio preguntó a JESÚS, diciendo: ¿No respondes algo? ¿Qué atestiguan éstos contra ti?”.

“Más Él callaba y nada respondía:” (El Silencio es la Elocuencia de la Sabiduría)”.

“El Sumo Sacerdote le volvió a preguntar, y le dice: ¿Eres tú el Cristo, el Hijo de Dios?” (El Segundo Logos).

“Y Jesús le dijo: Yo Soy (EL ES), y veréis al Hijo del Hombre (a todo verdadero Crístificado u OSIRIFICADO) sentado a la diestra de la potencia de Dios (el Primer Logos), y viniendo en las nubes del cielo”.

“Entonces, el Sumo Sacerdote (el Demonio de la Mala Voluntad) rasgó sus vestiduras y dijo:

¿Qué más tenemos necesidad de testigos?

“Oído habéis la blasfemia: ¿Qué os parece? Y ellos todos lo condenaron a ser culpado de muerte”.

“Y algunos comenzaron a escupir en Él, y cubrir su rostro, y darle bofetadas, y decirle: Profetiza. Y los servidores le herían de bofetadas”.

“Y luego por la mañana, habiendo tenido consejo los Príncipes de los Sacerdotes con los ancianos y con los escribas, y con todo el concilio, llevaron a Jesús atado, y le entregaron a Pilatos”.

“Y Pilatos (el Demonio de la Mente) le preguntó: ¿Eres tú el Rey de los Judíos?” “Y respondiendo Él, le dijo: Tú lo has dicho”.

“Y los Príncipes de los Sacerdotes (las autoridades de este mundo) le acusaban mucho”.

“Y le preguntó otra vez Pilatos, diciendo: ¿No respondes algo? Mira de cuantas cosas te acusan”. (Al Cristo Interno lo acusan todas las gentes, hasta aquellos que se dicen sus seguidores).

“Más Jesús (El Cristo Íntimo), ni aún con eso respondió. (Repito: El Silencio es la elocuencia de la sabiduría). Pilatos (El Demonio de la Mente) se maravillaba”.

“Empero, en el día de la fiesta les soltaba un preso, cualquiera que pidiesen”.

“Y había uno que se llamaba Barrabás (el Demonio de la perversidad que cada cual lleva dentro), preso con sus compañeros de motín que habían hecho muerte en una revuelta”. (Porque el EGO es siempre homicida y malvado).

“Y viniendo la multitud, comenzó a pedir hiciese como siempre les había hecho”. “Y Pilatos les respondió diciendo: ¿Queréis que os suelte al Rey de los Judíos?”

“Porque conocía que por envidia le habían entregado los Príncipes de los Sacerdotes (las autoridades de todo tipo)”.

“Más los Príncipes de los Sacerdotes incitaron a la multitud, que les soltase antes a Barrabás”. (Las autoridades de todo tipo defienden al EGO. Ellas dicen: Primero YO, Segundo YO, Tercero Yo).

“Y respondiendo Pilatos, les dice otra vez: ¿Qué pues queréis que haga del que llamáis Rey de los Judíos?”.

“Y ellos volvieron a dar voces: ¡Crucifícale! (¡Crucifixia! ¡Crucifixia! ¡Crucifixia!)”.

24. SOBRE BARRABAS:

Simboliza al ego con toda su perversión.

Ahora bien, en el día de la fiesta acostumbraba el Gobernador a soltar al pueblo un preso, el que quisiesen. Y tenían entonces un preso famoso llamado Barrabas. Reunidos, pues, ellos, les dijo Pilatos: “¿A quién queréis que os suelte a Barrabas o a Jesús, llamado el Cristo?” Porque sabía que por envidia le habían arrestado y entregado.

Barrabas simboliza el demonio de la perversidad que cada cual lleva dentro; preso con sus compañeros de motín que había hecho muerte en una revuelta, porque el ego, es siempre homicida, pendenciero, asesino, violento, alevoso y malvado.

Y viniendo la multitud, comenzó a pedir hiciese como siempre les había hecho. En nuestro interior psicológico nosotros siempre preferimos a Barrabas que al Cristo Íntimo y vivo.

Más los príncipes de los sacerdotes incitaron a la multitud que les soltase antes a Barrabas. Los príncipes de los sacerdotes simbolizan a las autoridades oficiales de este mundo que prefieren y defienden siempre al ego. Ellos dicen: primero yo, segundo yo, tercero yo.

Y respondiendo Pilatos, les dice otra vez: “¿Qué pues queréis que haga del que llamas Rey de los Judíos?” Y ellos volvieron a dar voces: ¡Crucifícale! ¡Crucifícale! ¡Crucifícale! Y que su sangre caiga sobre nosotros y sobre nuestros hijos”. (Mateo 27:22-25).

Esas multitudes de personas que piden la crucifixión del Señor no son las de hace dos mil años, ¡no!  Esas gentes que piden la crucifixión del Cristo, están dentro de nosotros mismos.  Repito, ¡aquí y ahora! Son los agregados psicológicos del ego indeseables que llevamos dentro, los demonios rojos de Seth, viva personificación de todos nuestros defectos de tipo psicológico. Son ellos los que gritan: ¡Crucifixia! ¡Crucifixia! ¡Crucifixia!

Y el Cristo Vivo es entregado a la muerte: ¿Quiénes le azotan? No son acaso todas las multitudes que llevamos dentro, en nuestro interior.

¿Quiénes le escupen? No son todos esos agregados psíquicos que personifican nuestros vicios, pasiones y ambiciones mundanales.

¿Quiénes ponen sobre Él la corona de espinas? ¿No son acaso todos esos engendros del infierno que nosotros hemos creado y que llevamos en nuestro interior? El Ego.

El acontecimiento del Gólgota no es de ayer, es de ahora, es presente: no meramente un pasado, como creen los ignorantes ilustrados. Pero aquellos que comprendan, trabajaran para alcanzar la cristificación en sí mismos, trabajaran para encarnar al Cristo Íntimo aquí y ahora, mientras estemos vivos.

25. SOBRE LA MUERTE DE JUDAS:

Se ahorca. Cumple su misión y nos enseña el evangelio de la decapitación del ego. Se ahorca y traza un puente entre Pedro y Juan, entre el sexo y la palabra. Solo trabajando al ego podemos avanzar en la transmutación sexual y llegar a encarnar al Verbo.

26. SOBRE LA CRUZ

La cruz misma del calvario es hondamente significativa. El palo vertical representa lo activo, el principio espiritual, cabalísticamente el número 1.

El palo horizontal representa lo pasivo, la materia, cabalísticamente el número 2.

El cruce del principio espiritual y la materia forman el universo, la creación, el número 12. El número de los apóstoles. 1 + 2 = 12 = el número del universo.

La cruz es símbolo de vida, el cruce de lo activo y lo pasivo. Lo espiritual con lo material, lo masculino y lo femenino. El macho y la hembra. En el cruce de ambos se halla la clave de todo poder y vida. Aquí está la clave de la redención. El gran Arcano A.Z.F.

Es con esa cruz que nosotros necesitamos avanzar por el sendero que ha de conducirnos hasta el Gólgota del Padre. Porque a los tenebrosos no les gusta la intersección del madero atravesado que forman sus dos brazos, como dos manos ingentes, que se extienden para ahuyentar las fuerzas siniestras y los poderes inferiores. Es la clave de la redención.

La Cruz misma del Calvario, es hondamente significativa. Bien sabemos nosotros que el “Phalus” vertical, dentro del “Ecteis” formal, hacen cruz. En otras palabras, enfatizaremos diciendo: El Lingam-Yoni, correctamente conectado forma cruz.

Es con esa cruz que nosotros necesitamos avanzar por el sendero que ha de conducirnos hasta el Gólgota del Padre; les invito a todos a entrar en el camino de la cristificación.

La cruz de la iniciación pesa con el peso de nuestro karma personal.

27. SOBRE LA CORONA DE ESPINAS:

El simbolismo hermético de la Corona de Espinas se relaciona con los procesos de purificación y pruebas del cuerpo de la voluntad del adepto. Forjar la voluntad Cristo en nosotros. Es la clásica diadema dolorosa en todo causal cristificado. Es la cristificación del cuerpo causal.

No está de más recordar que los arqueólogos descubrieron muchas cabezas de piedra coronadas de espinas; tales efigies pertenecen a la edad de bronce.

La honda significación del divino rostro con la cabeza coronada de espinas es: “Voluntad Cristo”.

Muy señalado me pareció el rostro del adorable, estampado milagrosamente en el Paño Sagrado de la Verónica.

Con singular diafanidad y transparencia divinales, vi extático resplandecer el paño de la Verónica sobre el Ara Sacra en la noche de la Iniciación. Símbolo que el iniciado ya posee un cuerpo causal y lo ha cristificado o purificado.

28. SOBRE EL CIRINEO:

“Y saliendo hallaron a un Cirineo, que se llamaba Simón; a este cargaron para que llevase su cruz”. El simbolismo iniciático del Cirineo es el del Gurú, que siempre aparece en el camino esotérico para ayudarnos con su guía, sus enseñanzas y sus prácticas. Recordemos el axioma hermético: “Cuando el estudiante está listo, el Maestro aparece”. Y “Cuando el oído es capaz de oír, entonces vienen los labios que han de llenarlos de sabiduría”.

29. SOBRE LOS 3 CLAVOS:

Si miramos a la cruz, veremos que tiene tres clavos. Los 3 clavos significan las 3 purificaciones de hierro y fuego. Tenemos que trabajar intensamente con el fuego sexual, con el hierro, construyendo y purificando interiormente.

La primera purificación de hierro y fuego por la que hay que pasar es en la primera montaña de la Iniciación, cuando uno recibe las 8 iniciaciones mayores. Nosotros creamos los cuerpos existenciales superiores del Ser, el cuerpo etérico, astral, mental, causal y nos fusionamos con nuestra Mónada divina. El adepto tiene que trabajar intensivamente dentro del campo esotérico iniciático. Esta es la primera montaña, se le llama la Montaña de la Iniciación.

La segunda purificación de hierro y fuego se refiere al trabajo de purificación de la Luna psicológica blanca, es decir eliminar de nuestra naturaleza esos defectos que se ven a simple vista, en el mundo físico, los que resaltan en nuestra personalidad, en nuestra vida diaria. La Segunda montaña de Resurrección. Cada montaña es un proceso iniciático que puede tardar años y décadas. Ascender los 7 kundalinis de fuego.

La tercera purificación de hierro y fuego simbolizada por el tercer clavo es sobre la cima de la segunda montaña, en vísperas de la resurrección espiritual, aquí se debe destruir todos los defectos psicológicos de la luna psicológica negra, de la sombra, es decir los defectos que no se ven, los ocultos; para purificar los cuerpos astral, mental y causal completamente, es decir la cristificación de los cuerpos existenciales superiores del Ser. Ascender los 7 kundalinis de luz.

30. SOBRE LA CRUCIFIXIÓN:

“Los soldados del presidente llevaron a Jesús al pretorio, y juntaron a Él toda la cuadrilla”.

“Y desnudándolo, le echaron encima un manto de grana”. (La Piedra Filosofal primero es negra, luego blanca, luego amarilla y por último roja).

“Y pusieron sobre su cabeza una corona tejida de espinas -clásica diadema dolorosa en todo astral cristificado – y una caña en su mano derecha -como la Vara de Aarón o el Bastón de los Patriarcas, viviente símbolo de la espina dorsal – e hincando la rodilla delante de Él, le burlaban diciendo: ¡Salve, Rey de los Judíos!”.

“Y después que le hubieron escarnecido -porque así es este camino del sexo -, le desnudaron el manto -porque ellos, los tenebrosos, jamás quieren que el Iniciado vista la púrpura de su Logoi Íntimo – y le vistieron de sus vestidos y le llevaron para crucificarle”.

“Y saliendo hallaron a un Cirineo, que se llamaba Simón: a éste cargaron para que llevase su Cruz”. (El Gurú siempre aparece en el camino para ayudarnos).

“Y como llegaron al lugar que se llama Gólgota, que es dicho el lugar de la Calavera”. (Sinónimo de muerte).

“Le dieron a beber vinagre con hiel; y gustando no quiso beberlo”. (Es evidente que la senda del filo de la navaja es muy amarga).

“Y después que le hubieron crucificado (con Cruz Sexual porque el PHALO embutido dentro del ÚTERO forma tal signo sacratísimo), repartieron sus vestidos echando suertes”. (Clara alusión a la eliminación de las humanas posesiones).

“Y sentados le guardaban allí”.

“Y pusieron sobre su cabeza su causa escrita: INRI. IGNIS NATURA RENOVATUR INTEGRAM”. (El Fuego Renueva Incesantemente la Naturaleza).

“Entonces crucificaron con Él dos ladrones, uno a la derecha y otro a la izquierda” (Buen ladrón el Divino poder secreto que para la cristificación se roba la energía sexual. Mal ladrón el enemigo secreto quien para el mal saquea el depósito del Hidrógeno Sexual SI-12).

“Y los que pasaban (los profanos y profanadores de siempre), le decían injurias, meneando sus cabezas”.

“Y diciendo: Tú, el que derribas el templo y en tres días lo reedificas – tú, que aniquilas al Adam de pecado para que nazca el Adam Celestial – sálvate a ti mismo: Si eres Hijo de Dios, desciende de la Cruz -porque a los tenebrosos no nos gusta la inserción del madero atravesado que forma tus dos brazos, como dos manos ingentes, que se extienden para ahuyentar las fuerzas siniestras y los poderes inferiores -.

“De esta manera también los príncipes de los sacerdotes – las autoridades -, escarneciendo con los escribas -o intelectuales – y los fariseos -que siempre presumen de virtuosos y santos – y los ancianos -personas muy respetables del mundo -, y decían:”

“A otros salvó, a sí mismo no puede salvarse: si es el Rey de Israel, descienda ahora de la cruz, que abandone la Senda del Filo de la Navaja y el SAHAJA MAITHUNA, y creeremos en Él”. “Confió en Dios. Líbrele ahora si le quiere, porque ha dicho: Soy el Hijo de Dios” (Él se cristificó y, por tanto, se hizo Hijo del Eterno. Nosotros Hijos del Diablo somos, porque somos fruto de fornicación).

“Y desde la hora sexta (tentación) fueron tinieblas sobre toda la Tierra hasta la hora nona”. (Novena Esfera). Sumando cabalísticamente tenemos 9 más 6 igual: 15. Este es el Arcano del Tiphom Bafometo: el Diablo. Tal valor esotérico corresponde a la Constelación de la Ballena, bajo cuya influencia cósmica se desenvuelve el Iniciado hasta lograr la resurrección. Recordemos la Señal de Jonás.

“Y cerca de la hora nona, Jesús exclamó con grande voz, diciendo: Elí, Elí, Elí, LAMA SABACHTANI; esto es: Dios mío, ¿Por qué me habéis abandonado?”. Ostensiblemente antes de la resurrección todo iniciado se siente realmente abandonado.

“Y algunos de los que estaban allí, oyéndolo, decían: A Elías llama éste. “(Helías, Eliú, Elías, Helios, el Sol Cristo, el Logoi Íntimo, en nuestra suprema aspiración).

“Y luego, corriendo uno de ellos, tomó una esponja, y la hinchó de vinagre, y poniéndola en una caña (símbolo de la Espina Dorsal) dábale de beber, como diciendo: el trabajo con los fuegos sexuales, espinales, es más amargo que la hiel.

“Más Jesús, habiendo otra vez exclamado con gran voz, dio el Espíritu”. (Así es como los Iniciados morimos en nosotros mismos con muerte de cruz).

“Y he aquí, el velo del templo, el famoso Velo de ISIS o Velo Sexual Adámico, producto del pecado original, se rompió en dos -debido a la muerte suprema del Ego- y la tierra tembló y las piedras de la senda del filo de la navaja se hendieron.

Escrito está con caracteres de fuego en el libro de los esplendores, que cuando Jesús -el Gran Sacerdote Gnóstico- exhaló su postrer aliento, la tierra filosófica, su muy humana persona, tembló al comprender la difícil tarea que el destino le tenía reservada; y las piedras de “la Senda del Filo de la Navaja” se hendieron tornándose el camino todavía más difícil. (Esto sólo comprenden íntegramente aquellos Maestros que, después de haber muerto en sí mismos, se preparan para la resurrección).

Símbolo de amor universal, de entrega, de compasión hacia el prójimo.

31. SOBRE EL I. N. R. I.

Ignis Natura Renovatur Integram. El fuego renueva incesantemente la naturaleza. Simbolismo Esotérico.

“Este es Jesús, el rey de los judíos”. Mateo 27, 37. El Cristo es fuego, luz y amor. Simbolismo Exotérico.

32. SOBRE LOS 2 LADRONES:

“Entonces crucificaron junto a Él dos ladrones, uno a la derecha y otro a la izquierda”. Mateo 27, 38. Agato, el buen ladrón (Dimas) en nuestro interior utiliza nuestras energías creadoras con el evidente propósito de cristalizar los cuerpos internos dentro de nosotros mismos, aquí y ahora. Las utiliza para despertar consciencia de momento en momento, vivir alertas y vigilantes, como el vigía en época de guerra; para crear y cristificar los cuerpos existenciales superiores del Ser.

Caco, el mal ladrón, (Gestas) escondido dentro de la tenebrosa cueva de la infra conciencia humana, saquea alevoso nuestras energías creadoras del organismo para satisfacción de brutales pasiones animales.

Podemos y debemos sentar como corolario el siguiente postulado: Agato y Caco, crucificados en el monte de las Calaveras, a derecha e izquierda del Gran Kabir, alegorizan enfáticamente al tantrismo blanco y al tantrismo negro, los adeptos del sendero de la derecha y los de la izquierda. Enseñanzas de la Logia Blanca y enseñanzas de la Logia Negra.

En esta estación del Viacrucis íntimo se debe reducir a polvareda cósmica al mal ladrón, el tenebroso Caco de nuestra naturaleza interior.

La Biblia, desde el Génesis al Apocalipsis, no es sino una serie de anales históricos de la Gran lucha entre los secuaces de AGATO y de CACO, la Magia Blanca y la Negra; los Adeptos del Sendero de la Derecha, los Profetas, y los de la Izquierda, los Levitas…

En los abismos de Urano hube de reducir a polvareda cósmica al Mal Ladrón, el tenebroso CACO, aquel que antes saqueara el centro sexual de mi máquina orgánica, para vil satisfacción de animalescas pasiones…

33. SOBRE LA LANZA DE LONGINOS

Símbolo alquímico. Símbolo indispensable de muerte en el trabajo sobre la eliminación del ego. Formada conforme trabajamos y optimizamos la transmutación de nuestra energía sexual. La lanza en las manos de nuestra Divina Madre Particular para la eliminación de un yo-defecto previamente comprendido. Simboliza el principio activo, el miembro viril, la lanza de Eros.

34. SOBRE LOS 5 ESTIGMAS

No es posible la resurrección esotérica sin haber previamente formado los cinco estigmas del Adorable en el cuerpo astral. Estos estigmas se logran con duros trabajos purificando el sacramento del Amor. Saber purificar el sacramento del amor es optimizar el trabajo del Arcano A.Z.F. A nivel de pensamientos, sentimientos, emociones y hábitos.

Y sucedió que, habiéndome ido de vacaciones al Puerto de Acapulco en las costas del Pacífico, México, hube de ser instruido sobre la estigmatización del Cuerpo Astral…

Fuera del Cuerpo Físico, un Monje Santo, un Ermitaño, trató de atravesar las plantas de mis manos con el propósito de estigmatizarme; en instantes en que aquel cenobita golpeaba el clavo para perforar mis manos, saltaban rayos divinos…

En esos momentos oré a mi Padre que está en secreto, solicitándole ayuda: la oración llegó al Señor…

Es incuestionable que en la Iniciación había recibido tales estigmas, pero en forma simbólica…

En la Montaña de la Resurrección debía formarlos, hacerlos en la Forja de los Cíclopes…

El Anacoreta me condujo hasta la Iglesia Gnóstica; SHIVA, mi Monada Divina, anduvo junto… Dentro del Templo vi a un religioso ANDROGINO, vestido con la túnica purpúrea, junto a la Pila del Bautismo…

“Es muy fuerte y responde muy bien, pero le falta cumplir mejor con el Sacramento de la Iglesia de “ROMA” (AMOR)…” Dijo el MAHATMA dirigiéndose a mi Monada…”

Desde entonces comprendí la necesidad de refinar aún más la energía creadora; así fue como hice del Maithuna, una forma de la oración…

La Inserción del Phalo Vertical dentro del Útero Formal, hace Cruz. Incuestionablemente los cinco estigmas Crísticos en el Cuerpo Astral, se forman con la Santa Cruz…

No es posible la Resurrección sin haber previamente formado los estigmas del Adorable en el Cuerpo Astral…

Así formé yo mismo mis estigmas, así los han formado los Místicos de todos los tiempos…

35. SOBRE LAS 3 MARÍAS:

Históricamente: entre las cuales estaban María Magdalena, María madre de Santiago y de José, y la madre de los hijos de Zebedeo. (Mateo 27:56).

Las 3 santas mujeres, las 3 Marías, representan a Lucia, Clemencia y Sophia, es decir: Luz, Clemencia y Sabiduría. Las 3 manifestaciones del Eterno Femenino:

  1. La Bendita Madre Cósmica. Sofía. Sabiduría.
  2. La Bendita Madre Naturaleza. Clemencia. Misericordia y perdón.
  3. La Bendita Madre Particular. Lucía. Luz.

36. SOBRE LOS DOS HUESOS Y EL CRÁNEO AL PIE DE LA CRUZ

Simbolizan los huesos fémures y el cráneo de Adán. La cruz del tantra triunfa sobre la fornicación que nos sacó del Edén.

“Así no debéis cruzar los brazos” -me dijo un Adepto del templo – y luego añadió: “El derecho debe ir sobre el izquierdo”. Yo obedecí sus indicaciones.

¿Habéis visto sarcófagos egipcios? Los brazos de los difuntos cruzados sobre el pecho ilustran estas afirmaciones.

Cualquier cráneo entre dos canillas o huesos de muerto, como señal de peligro, dice lo mismo. Hacer la Voluntad del Padre, así en los cielos como en la Tierra, morir en el Señor, es el hondo significado de tal símbolo…

El Gran KABIR Jesús, en el Monte Oliveti, oró así:

“Padre mío, si es posible pasa de mí este Cáliz, mas no se haga mi Voluntad sino la tuya”.

37. SOBRE EL CRUCIFIJO:

El crucifijo completo y correcto simboliza todo el mapa del camino iniciático hasta la liberación final. Cristo vivo, tres clavos, INRI.

38. SOBRE LAS 7 PALABRAS:

  1. PADRE PERDÓNALOS PORQUE NO SABEN LO QUE HACEN. (Lucas 23:34). Amor conciente, Compasión, comprensión y amor al prójimo. Ver con conciencia despierta. 
  1. EN VERDAD, EN VERDAD TE DIGO QUE HOY ESTARÁS CONMIGO EN EL PARAÍSO. (Lucas 23:43). Promesa de nuestro Cristo íntimo. Fe y confianza en Él. 
  1. MADRE, HE AHÍ A TU HIJO; HIJO, HE AHÍ A TU MADRE. (Juan 19:26-30). Se refiere a que nuestra Madre Divina va tomando forma y fuerza en nosotros y que nosotros veamos y contemos con nuestra Madre Divina. 
  1. PADRE MÍO, ¿POR QUÉ ME HAS ABANDONADO? (Mateo 27: 45-50); (Marcos 15:34). En las supremas pruebas el iniciado se siente solo. No lo quieren los demonios porque los ha traicionado, les ha dado las espaldas. No lo quieren los ángeles porque todavía no es perfecto. 
  1. TENGO SED. (Juan 19:27-30). El Cristo Íntimo siempre tendrá sed si no transmutamos nuestras aguas de vida. 
  1. TODO ESTÁ CONSUMADO. (Juan 19:26-30). La misión se ha cumplido, la gran obra se ha realizado de acuerdo a la ley. 
  1. PADRE MÍO EN TUS MANOS ENCOMIENDO MI ESPÍRITU. (Lucas 23:46). Fe. Confianza, certeza, entrega a nuestro Ser interior. Aceptación y rendición.

El Señor es elevado al Calvario y sobre las cumbres majestuosas del Calvario dirá: “El que en mi cree nunca andará en tinieblas, más tendrá la lumbre de la vida, yo soy el pan de la vida, yo soy el pan vivo, el que come mi carne y bebe mi sangre, tendrá la vida eterna, y yo le resucitaré en el día postrero. El que come mi carne y bebe mi sangre, en mi mora y yo en él.

El Señor no guarda rencores para nadie… ¡Padre mío, en tus manos encomiendo mi espíritu! Pronunciada esta gran palabra, no se escucharán sino rayos y truenos en medio de grandes cataclismos interiores. Cumplida esta labor del espíritu en el cuerpo, será depositado el Cristo o el “Krestos”, el Chistrus, Vishnú, el que penetra, en su sepulcro místico.

39. SOBRE EL GOLGOTA

Lugar de la calavera. Lugar de la muerte. Simboliza la montaña de la iniciación. La primera montaña, donde se trabaja la construcción de los siete cuerpos. La segunda montaña de la Resurrección se trabaja el ascenso de las siete serpientes de fuego. La tercera montaña de la Ascensión se trabaja la eliminación de la luna psicológica negra y el ascenso de las siete serpientes de luz. 

 

40. SOBRE EL SANTO SEPULCRO

Simboliza la muerte total del ego en un 100% para lograr la resurrección. Ejemplo de insultar a un cadáver y este ya no reacciona cuando el ego está muerto y ya no hay quien reaccione.

 

41. SOBRE LA RESURRECCIÓN

Pronunciada esta gran palabra, no se escucharán sino rayos y truenos en medio de grandes cataclismos interiores. Cumplida esta labor del espíritu en el cuerpo, será depositado el Cristo en su sepulcro místico.

Embalsamaron su cuerpo, prepararon su cuerpo con perfumes, bálsamos, ungüentos, etc. Para su resurrección.

Después del tercer día, será levantado, resucitado en el iniciado para transformar a este en una criatura perfecta. Quien lo logre se convertirá de hecho en un iluminado, en un auténtico cristificado, más allá del bien y del mal.

Debemos comprender en forma íntegra el simbolismo sepulcral. Debe morir toda nuestra perversidad, todo el ego, en un 100%, a todo nivel, para tener derecho a la resurrección de nuestro Cristo Íntimo dentro de nuestro Templo-Corazón, aquí y ahora.

Así una vez que el adepto ha pasado por todo el Viacrucis consigue la resurrección del Logos Íntimo dentro de lo psicosomático, dentro de lo místico-sensorial, dentro de lo meramente psíquico, psicológico trascendental; entonces será convertido en columna del templo.

El Crestos resurrecto en el ser humano, devela los misterios, enseña no solamente a los exteriores, sino a los interiores, trabaja por la humanidad doliente, realiza alguna obra portentosa, Él debe instruir y cumplir una gran misión.

Cuando se hace el Séptimo Trabajo, el Séptimo Día de la Semana Santa, la Obra queda consumada: ¡Consumatum Est! ¡Todo se ha consumado! Entonces es la suprema entrega del Espíritu al Padre.

Más tarde, en el Octavo Día, el Padre en el Hijo, en el Hijo resucitado, se levanta de entre su Sepulcro de Cristal después de la Resurrección de los Muertos. Pero ese Trabajo, todo en sí, forma la Semana Santa.

Hemos mirado esto desde el ángulo del Génesis, porque con las mismas Leyes que el Logos (Unidad Múltiple Perfecta) usó para crear este sistema solar, esas mismas tiene que usar el alquimista para crear su Universo Interior, para llegar a tener realidad, para crear su Universo propio; son las mismas Leyes. Al Trabajar uno con la Alquimia está trabajando con las mismas Leyes con las que el creador creó el Universo; aún más, está ampliando la Obra del Creador, porque la Obra del Creador queda ampliada cuando nace un nuevo Maestro. De manera, pues, que se consuma la Obra y se llega a lo que se quiere.

El Octavo Día es siempre para resucitar.

Se manifiesta y continúa reuniéndose con los discípulos y las santa mujeres durante 12 años más en su condición de Hombre resurrecto. Todas estas enseñanzas impartidas aparecen en la obra la Pistis Sophia, develada también por nuestro venerable Maestro Samael Aun Weor.

 

42. SOBRE LOS 12 APÓSTOLES

Los Doce Apóstoles están dentro de nosotros mismos representan las doce partes de nuestro propio Ser, autónomas, autoconscientes e independientes. Durante la manifestación se expresa como una pluralidad. Las doce facultades o doce potestades, penetran en el vientre de la Divina Madre Kundalini para venir a la existencia del mundo y de la forma, y personifican exactamente a los doce.

1. Pedro que se entiende con los misterios del sexo, la piedra, patar. Para que nos indique textualmente el camino de Vulcano. El nombre completo es Simón Pedro, se desenvolvió buena parte de su vida como pescador hasta conocer a Jesús y se convirtió en uno de los 12 apóstoles. Realizó obras de evangelio hasta la Babilonia. Murió crucificado de cabeza hacia abajo en Roma.

2. Juan que representa el Verbo, la Gran Palabra. ¡Heru Pa Kroat! Fuego. I.E.O.U.A.M. Nos enseña la ciencia del Logos. Juan. Nombre completo de Juan Boanerges. Se le conoce como el ‘discípulo amado’. También fue pescador. Escribió evangelios con su nombre y el capítulo del Apocalipsis. Se le desterró en una isla, luego de su liberación murió de alta edad. Evangelio del Elemento Fuego.

3. Santiago, el “anciano”. Santiago Boanerges, hermano de Juan, apodado entre el grupo como el “Anciano” o «Mayor>. Predicaba en varias zonas de Israel hasta su decapitación ordenada por Herodes. El cristianismo dice que el apóstol Santiago está enterrado en la catedral de Santiago de Compostela.

4. Santiago, el “Joven”. El otro Santiago de los 12 apóstoles, conocido como el “más joven”. Hermano de Judas Tadeo. Fue crucificado en Egipto, en el continente africano. Santiago, el menor, nos enseña a fijar el oro en los cuerpos existenciales. Patrón de la Gran Obra.

5. Judas Tadeo. El primer Judas de la lista de nombres. El hermano mayor de Santiago. Después de la crucifixión de Cristo se dedicaba a predicar en Persia donde fue asesinado.

6. Judas Iscariote. El otro Judas. Iscariote es famosamente conocido como “el traidor”. Vendió a Jesús por 30 monedas de plata. La Plata es lunar, el ego es lunar. Se suicidó ahorcándose. Representa el evangelio de la decapitación budista, la eliminación del ego.

Un Judas diferente, un Judas que entiende a fondo la cuestión del Ego. Un Judas cuyo Evangelio nos lleva a la disolución del mí mismo, del sí mismo.

7. Bartolomé Natanael, de Caná de Galilea. Misionó en Armenia para luego predicar en la India, lugar de su muerte.

8. Andrés. Fue hermano de Pedro e hijo de Jonás. También se desempeñaba como pescador. Murió crucificado en forma de X en Grecia. Nos indica con precisión meridiana lo que son los tres factores de la revolución de la conciencia.

Nacer, es decir, como se fabrican los cuerpos existenciales superiores del Ser. Morir, cómo se desintegran los factores particulares que se relacionan con nosotros, específicamente y con cada uno de nos. Sacrificarse por la humanidad, la cruz de San Andrés; indicando la mezcla del Azufre y el Mercurio tan indispensable para la creación de los cuerpos existenciales superiores del Ser, mediante el cumplimiento del deber “Parlok”, es profundamente significativo.

9. Mateo. Trabaja como cobrador de impuestos hasta su primer contacto con Jesús. Escribió en la Biblia el evangelio que lleva su nombre. Murió en Etiopía. Nos enseña la ciencia pura. Mateo, científico cuan ninguno, existe en nosotros, nos enseña la ciencia pura, desconocida para los científicos que solo conocen todo ese podridero de teorías universitarias, que hoy están de moda y mañana pasan a la historia… ¡Ciencia pura, es completamente diferente! Sólo Mateo puede instruirnos en ella. Evangelio del Elemento Tierra.

10. Felipe. Otro de los pescadores que se convirtieron en apóstoles. Falleció en Hierapolis, ciudad antigua que hoy está en ruinas y que pertenece a la actual Turquía. Felipe que es capaz de enseñarnos a viajar fuera del cuerpo físico a través del espacio, para los estados de jinas, para las salidas astrales.

11. Simón. Conocido también como “el Zelote”. Vivió en Galilea hasta su muerte.

12. Tomás. Su nombre completo era Tomás Dídimos. Hizo trabajos en varios países siendo asesinado por una lanza en la India, Asia. Nos enseña a manejar la mente.

13. Lucas. Amigo de Pablo. Médico de profesión. Enseña a profetizar. Predicó el evangelio en Grecia y murió mártir. Lucas, con su Evangelio Solar, es profeta, y nos indica lo que ha de ser la vida en la Edad de Oro. Evangelio del Elemento Aire.

14. Marcos. Discípulo y traductor de Pedro y de Pablo. Evangelio del Elemento Agua.

15. Pablo. Nos muestra el camino de la sabiduría, la filosofía, la Gnosis.

Tenía se dice, doce Apóstoles; esos doce Apóstoles están dentro de nosotros mismos, aquí y ahora. Son las doce partes fundamentales de nuestro propio Ser; las doce Potestades dentro de cada uno de ustedes, en su propio Ser Interior profundo…

Cada uno de los Doce, está dentro de nosotros mismos, porque nuestro Ser tiene doce partes fundamentales, los Doce Apóstoles, aquí y ahora. Así quienes quieran llegar a ser magos en el sentido trascendental de la palabra, tienen que aprender a relacionarse consigo mismo, con cada una de las doce partes del Ser; y esto sólo es posible quemando con el “INRI” los agregados psicológicos que en nuestro interior cargamos. En tanto el Ego exista en nosotros, las correctas relaciones con todas y cada una de las partes de nuestro Ser, resultará imposible.

EXPERIENCIA DE SAMAEL: Vivenció muchos pasajes del viacrucis a lo largo de su proceso iniciático en los mundos internos.


TAREA

Leer y estudiar la pasión, muerte y resurrección de nuestro señor Jesús el Cristo en los cuatro evangelios, reflexionar y llevar algunas enseñanzas a su vida práctica de la mejor manera.

Resumen extractado de las enseñanzas del venerable Maestro Samael Aun Weor.